Alrededor de 50 metros de vialidad fueron recubiertos por más de 40 centímetros en espesor de material sólido y vegetal.
Ayer en horas de la madrugada
Omer Molina
Fotos: Héctor Molina
La carretera hacia Jají, municipio Campo Elías de Mérida, estuvo obstaculizada ayer por más de 12 horas tras fuerte deslizamiento de talud ubicado en el sector El Portachuelo, específicamente en el Paso de Barro, denominado así por aledaños ante los recurrentes derrumbes que se producen en la zona.
El paso estuvo restringido para vehículos pequeños y medianos, sólo los rústicos pudieron abrir brecha y pasar de manera accidentada, mientras que transportistas decidieron trancar por completo el acceso con sus buses, como medida de protesta ante la ausencia de maquinaria del ayuntamiento y la Gobernación de Mérida.
“Decidimos trancar el paso por completo, debido a que las busetas son las que trabajan en el sector y nosotros los conductores somos los que perdemos económicamente por esta situación que nos está agobiando desde hace muchos años”, comentó Nicolás Suárez, miembro del consejo comunal La Esmeralda y transportista.
Alrededor de 50 metros de vialidad fueron recubiertos por más de 40 centímetros en espesor de material sólido y vegetal. Una mina que yace en el cerro que se deslizó, continúa filtrando agua y humedeciendo el terreno inclinado, debilitándolo cada vez más hasta que la lluvia lo termina de desplomar constantemente.
Carla Pérez, vecina y comerciante en la vía principal a Jají, propietaria de un puesto de empanadas metros antes de llegar a la zona de derrumbe, indicó que la situación con las lluvias se está tornando alarmante, puesto que en varios tramos de la carretera, las calzadas se siguen hundiendo y desmembrando el asfalto, situación que está afectando gravemente el comercio, la actividad turística y el quehacer diario de los habitantes de Jají y sectores aledaños en materia educativa y laboral.
Alrededor de las 4 de la tarde, maquinaria del ayuntamiento llegó al sitio para remover el lodo y los escombros en la zona obstruida, según informó Suárez, reabriendo el paso por completo alrededor de las 5 de la tarde, pero añadió el transportista y vocero comunal, que luego de pasar un poco las lluvias, volverán a trancar el paso como medida de protesta, si no se les adelantan los constantes derrumbes en el sector.
