Rescataron a la hermana
del dueño de La Nota
*** Funcionarios del Departamento de Inteligencia de Polimérida y del Cicpc encontraron a la víctima en Ejido, y detuvieron a cinco de sus captores, presuntamente una es oficial retirada de la Fuerza Aérea Venezolana
Isabel Manzanilla Delfín
Fotos: Héctor Molina
Tras cuatro días de cautiverio fue rescatada ayer Isabella Saray Calderón Rivas, hermana del dueño de la cadena de restaurantes “La Nota”. En el chalet Neblinas de Mérida, ubicado en el sector Loma de Los Ángeles, vía El Salado, municipio Campo Elías, tenían los delincuentes escondida a la víctima, de 22 años.
Treinta y cinco funcionarios del Departamento de Inteligencia de Polimérida y del Cicpc aplicaron la operación rescate ayer a las 5:40 de la madrugada, logrando hallar a la joven y a cinco de los presuntos delincuentes. Los servidores públicos emboscaron a los secuestradores sin darles chance a que escaparan, por lo que tuvieron que rendirse y entregar a la chica.
Encadenada
“como un perro”
De la mano de dos de sus hermanos, Isabella Calderón ingresó a la sala donde la esperaban los medios de comunicación la mañana de ayer. Apenas acababa de pasar por el chequeo médico y aún esperaba por reencontrarse con sus padres en su casa.
“Me mantuvieron vendada y amarrada del cuello con una cadena, como un perro, atada a la cama”, dijo la joven en su corta intervención. Agregó que la alimentaron con jugos y muy pocas veces comida. “Era un cuarto oscuro y yo no podía ver bien. Sabía que estaba en Ejido, pero más nada, eso porque la chica que estaba ahí me lo dijo”. Para describir la vivencia manifestó: “Me sentí frustrada pero siempre tuve confianza en Dios y en que todo iba a salir bien”, concluyó y continuó esperando –con la mirada perdida– mientras su hermano terminaba de agradecer a los cuerpos de seguridad.
“Seguiremos viviendo
aquí, confiamos en Mérida”
Pedro Calderón, el propietario de “La Nota”, aseguró que lo que vivió fue “un calvario. No es igual que te lo cuenten a que lo vivas. Estar ahí, pensando que la vida de un familiar pende de un hilo. Desde lo más profundo de mi corazón tenía confianza, estoy agradecido con los funcionarios, con los amigos y con Dios. Primero Dios, gracias a Él tengo a Sara aquí. El día más importante de mi vida es hoy”.
El ciudadano informó que tuvo comunicación con los plagiarios en dos oportunidades, la primera fue el miércoles, a las 11:35 de la mañana. Le pidieron 2 millones quinientos mil dólares para rescatar a su hermana, los cuales no entregó a los delincuentes. A pesar de “el calvario” de experiencia, el empresario afirmó: “Nací en Mérida. Empezamos desde abajo, y seguiremos trabajando por Mérida, seguiremos viviendo aquí. Confiamos en sus organismos, y a partir de este momento me siento más seguro en esta ciudad que en cualquier otra parte de Venezuela”.
Contó que cuando el teléfono sonó a las 6:00 de la mañana de ayer, pensó que eran los secuestradores. “Mi papá me apuraba para que contestara. Cuando atendí era un inspector, me dijo: ‘Pedro, tenemos a tu hermana’. La emoción que sentí es inexplicable. No hay palabras. Espero que esto sirva a muchas familias para que crean en que cuando se cree en Dios y se va por la justicia se logran los objetivos. Siempre confié en que mi hermana iba a ser rescatada”.
Dijo no saber si alguno de los secuestradores tiene alguna conexión con su familia o algún conocido, y aseguró que no había recibido antes amenazas de secuestro.
Cinco detenidos
El teniente coronel Juan Pedro Grillo, director general de Polimérida, informó que los cinco detenidos por este caso son Daniel Felipe Rieta Rivas (29), Nilson Zambrano (47), Yanet Iraima García Urbina (30), Antoni Cristancho (22) y Ana Cecilia Contreras Salas (50). Se conoció por medio de una fuente oficial, que una de las mujeres detenidas presuntamente es oficial retirada de la Fuerza Aérea Venezolana, y que entre el resto de los detenidos supuestamente hay dos colombianos.
El director de Polimérida indicó que se estaba verificando los antecedentes penales de los sujetos, y que varios de ellos al parecer tienen prontuario por secuestro.
En el lugar del rescate incautaron dos armas de fuego, una pistola Pietro Beretta, calibre 9 mm, con mira láser, y una pistola marca Jericó, calibre 380; además de varios teléfonos celulares desde los que establecían los contactos con los familiares. También retuvieron un auto Toyota Fort Runner, color gris, año 2007, placas VCN-81S. En un segundo inmueble allanado ayer en la urbanización La Mata, quinta Madre, fue localizado un vehículo Fiat Uno, color azul, placas AFC-O6Z, el cual había sido utilizado por los plagiarios para el trasbordo y traslado de la víctima.
“Esto da fe que sí está funcionando el sistema que hemos planificado. No es obra de la casualidad, sino que se trata de un dispositivo de acción preventiva”, indicó Grillo. A su lado, el comisario Edgar Arellano, jefe de la delegación Mérida del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), informó que, según el examen médico forense, la víctima no presenta lesiones de carácter físico visibles, aunque como estaba atada con una cadena eso produce connotación de maltrato. “Ella está consternada psicológicamente”.
Los directores de los organismos apuntaron que en el operativo también participaron funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana y la Brigada de Infantería. “Esta es la punta del iceberg para terminar de desmantelar por completo esta banda”, acotó Grillo.
Secuestrada en La Mara
Isabella Saray Calderón Rivas fue plagiada el domingo aproximadamente a las 8:30 de la noche cuando llegaba, junto a una prima, a su casa en la urbanización La Candelaria del sector La Mara, municipio Libertador. Tres sujetos, al parecer con acento colombiano, portando armas de fuego, las obligaron a bajarse de su camioneta Toyota Merú y a subirse en un Fiat Palio, color negro, en el que huyeron.
A la prima de Calderón la dejaron abandonada y atada en un vehículo Land Cruiser, modelo Prado, color dorado, cerca del estadio Metropolitano. Mientras que a la administradora del establecimiento de comida rápida se la llevaron con rumbo desconocido, hasta que fue rescatada ayer en Ejido.
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